La transformación digital está suponiendo una auténtica revolución en nuestro día a día. Así, es innegable el impacto que los avances tecnológicos están teniendo en todos los sectores de la sociedad y, por supuesto, también en la comunicación. Encontramos un ejemplo claro en el impacto de la Inteligencia Artificial, que está cambiando radicalmente la forma en que nos comunicamos, interactuamos y consumimos la información.
Entre otros avances, la Inteligencia Artificial pone a nuestra disposición distintas herramientas que, bien utilizadas, ofrecen muchas posibilidades dentro del campo de la comunicación.
1. Generación de contenidos
Probablemente todos hemos oído hablar de Chat GPT, un chatbot de IA especializado en diálogo. Con la usabilidad de una sencilla aplicación de mensajería instantánea, genera al momento cualquier contenido que le solicitemos. Aunque es la más conocida, no es la única herramienta de estas características, ya que también existen otras como ChatSonic o Bing Chat, muy similares.
Estas aplicaciones funcionan con PNL (Procesamiento del Lenguaje Natural), una rama de la inteligencia artificial que utiliza el aprendizaje automático para procesar textos y datos. Gracias a ello, son capaces de generar contenidos escritos semejantes a los que desarrollaría un humano.
Estas herramientas ofrecen muchas y distintas posibilidades, como traducciones, ideas creativas, o personalización de mensajes para audiencias específicas. Además, la generación de contenido impulsada por IA no solo agiliza el proceso de creación del mismo, sino que también pueden analizar los resultados pasados de un contenido, ofreciendo consejos para optimizarlo y mejorar su impacto.
2. Influencers virtuales
Lil Miquela, Shudu o Bermuda son influencers con cientos de miles de followers que comparten una particularidad, todos ellos son virtuales. Se trata de personajes digitales creados mediante Inteligencia Artificial que, al igual que sus equivalentes de carne y hueso, tienen la capacidad de influir en las opiniones y decisiones de aquellos que consumen su contenido.
Aunque no son personas reales, están diseñados para y comportarse de manera similar a los humanos, lo que les permite conectar con sus audiencias de manera auténtica. Los influencers virtuales ofrecen a las marcas nuevas oportunidades para colaboraciones y campañas de marketing. Al permitirles controlar completamente la narrativa y la imagen de estos personales, les garantizan la absoluta coherencia de sus mensajes, a la vez que se asocian perfectamente con sus valores y objetivos.
3. Compra programática
La automatización en la compra y venta de espacios publicitarios online gracias a la Inteligencia Artificial está permitiendo optimizar significativamente este proceso, mejorando la eficiencia y precisión de las campañas. Gracias al uso de algoritmos avanzados, la IA analiza enormes conjuntos de datos en tiempo real, identificando patrones de comportamiento del usuario y adaptando las estrategias publicitarias para maximizar el retorno de la inversión.
Además, la IA aplicada a la compra programática también trasformando la personalización publicitaria, permitiéndonos ir mucho más allá. Gracias al análisis predictivo, las plataformas pueden segmentar audiencias de manera más precisa, ofreciendo anuncios mucho más relevantes para las audiencias. Esto no solo mejora la experiencia del usuario, al mostrarle el contenido que realmente le interesa, sino que también aumenta la efectividad de las campañas, ya que estas se dirigen a públicos más específicos y receptivos.
4. Contenido audiovisual
Esta tecnología también está democratizando la creación y edición del contenido audiovisual. Existen distintas plataformas impulsadas por IA que, de manera muy intuitiva, ofrecen a los usuarios la posibilidad de crear contenidos audiovisuales atractivos sin necesidad de conocimientos técnicos especializados.
Por ejemplo, en el caso de las imágenes, además de ajustar automáticamente parámetros como la iluminación, el contraste o la saturación, la IA permite incluso crear nuevas imágenes a través de datos existentes. Esto puede incluir la generación de imágenes realistas a partir de descripciones de texto, la aplicación de estilos artísticos a una fotografía existente o la creación de composiciones visuales mediante la combinación de múltiples imágenes.
Si hablamos del formato vídeo, estas herramientas pueden sugerir música de fondo, efectos de sonido y transiciones adecuadas para mejorar la narrativa y la calidad general del contenido. La IA ofrece también algoritmos avanzados que identifican automáticamente los momentos más destacados de un video, corrigen el color y la iluminación, e incluso sincronizan audio y video.
5. Chatbots inteligentes
Estos programas de software pueden mantener conversaciones naturales con los usuarios, responder preguntas comunes, resolver problemas y brindar asistencia las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Así, los chatbots mejoran la experiencia del usuario al proporcionar respuestas rápidas y personalizadas, al tiempo que reducen la carga de trabajo para los equipos de atención al cliente.
A medida que la Inteligencia Artificial continúa avanzando, es probable que veamos aún más innovaciones en el campo de la comunicación. Desde la personalización extrema hasta la automatización completa, la IA está allanando el camino para una comunicación más inteligente, eficiente y personalizada.
Sin embargo, también es importante abordar los desafíos éticos y sociales que surgen con estos avances. Desde la desinformación generada por IA hasta la preocupación por la privacidad de los datos, es fundamental que la sociedad se comprometa en un diálogo continuo sobre cómo garantizar que esta tecnología se utilice de manera responsable y ética en el ámbito de la comunicación.