En los últimos años estamos viendo un creciente incremento de las compañías que confían en la importancia de la comunicación dentro de su estrategia empresarial. Este es un aspecto destacado a tener en cuenta por su trascendencia, y que en cierta medida va de la mano del desarrollo de las tecnologías digitales.
La comunicación es una herramienta indispensable para aquellas empresas que pretenden ser relevantes en un escenario de gran competencia dentro de un mercado global en constante cambio. Puede darse el caso de que una gran empresa en su sector pase desapercibida para muchos de sus públicos debido a la ausencia de una estrategia de comunicación eficaz. Esto no solo es negativo a nivel de negocio, sino que también lo es a nivel reputacional. Sin embargo, son muchos los casos de empresas no relevantes cuya estrategia de comunicación (apoyada por una de marketing) les ha impulsado hasta cotas inimaginables.
A pesar de esto, los empresarios que aún no tienen claro qué puede hacer la comunicación por ellos y cómo. En ocasiones, algunas compañías pueden llegar a confundir comunicación y marketing que, si bien son áreas relacionadas, sus objetivos y métodos son muy distintos. En otras ocasiones, pueden llegar a creer que todo lo que hacen es comunicable para los medios de comunicación; y si bien la comunicación forma parte de cualquier aspecto de nuestra vida, no todo es comunicable o de interés para ellos. Este es un aspecto en el que me gustaría incidir en este artículo.
Los consultores de comunicación estamos para asesorar y ayudar a las empresas a ser relevantes a través de la comunicación. Y debemos hacerlo con honestidad e información. Ni todo es comunicable, ni todo es de interés para determinados públicos. Ni todo es factible de aparecer en la televisión, ni todo es publicable en todos los medios de comunicación.
Algunos clientes (cada vez menos) piensan que la mayor parte de los aspectos de su trabajo tiene la suficiente relevancia para aparecer en los principales medios de comunicación. En este sentido es nuestra labor como comunicadores determinar qué se puede comunicar y a través de que canales, y qué no lo es. Y lo más importante, saber trasladarlo al empresario de forma clara y detallada.
Los medios de comunicación necesitan contar con información relevante que sea de interés para sus lectores entre la sobreinformación existente en la actualidad. Por ello, nuestro trabajo como expertos en comunicación (muchos somos periodistas) consiste en trabajar la información de la empresa y darle forma de tal manera que se genere interés de los periodistas en ella. Tenemos que crear y vender historias fundamentadas en hechos reales que sean relevantes y, en consecuencia, noticiables. Aquí radica el gran reto, en convertir un hecho o aspecto empresarial en una historia informativa atractiva para ser comunicada. No podemos apabullar a los periodistas con informaciones que de antemano ya es evidente que no les puede interesar.
Conocer los medios de comunicación es el aspecto fundamental en esta tarea para entenderles y conocer sus necesidades. Una vez conseguido esto, poder aportarles lo que necesitan es cuestión de análisis, trabajo y dedicación.